Desde hace varios años tenemos un sector social, muy vinculado con un grupo etareo que para muchos ya no existe.
En un discurso realizado por
Esos miles de jóvenes que existen en los grandes centros urbanos que no estudia ni trabajan, planteando que vienen de una o dos generaciones que no vieron trabajar a sus padres o hacerlo con continuidad.
Esa cultura del trabajo que durante décadas se había logrado construir, fue destruyéndose en la década del noventa y sus consecuencias se están viendo desde la crisis del 2001.
Continuando su discurso nuevamente hace referencia a ese sector etareo adulto de padres mayores de 40 años como sino existieran.
No es el único funcionario nacional, sino también provinciales, ni sello de un partido político, ignoran la existencia de miles, millones de personas adultas que habiendo trabajado durante décadas, vienen teniendo problemas laborales.
No está mal pensar en esos jóvenes, ya que toda nación se retroalimenta del desarrollo de una nueva generación, pero hay adultos que los deben criar, proveerle educación, moral y ejemplo.
Por eso, dar por inexistente a sus padres y/o mayores es sin decir ni mencionar que esos miles o millones están “muertos”, lo que vemos son solo fantasmas que andan en una sociedad de incluidos, pero fueron condenados a la marginación social y a una subsistencia que los va apartando cada día mas.
Tan difícil es pensar en ellos, claro, no se conforman con discursos, sino con realidades, empleos decentes, programas de inclusión dignos para recuperar sus vidas.
Así, se podrán hacer cargo de la vida de sus hijos y demás dependientes, existirá futuro y rescataremos la cultura del trabajo.
Daniel Ceresa
Grupo de Reinserción Laboral + 45
busquedalaboral_45@yahoo.com.ar
No hay comentarios:
Publicar un comentario