Ya el Presidente Raúl Alfonsín, había creado la CONADEP, para que investigara los actos de terrorismo de Estado cometidos entre 1976 y 1983, durante la dictadura militar.
Alfonsín no tuvo el coraje cívico de exigir la investigación de los actos de terrorismo de Estado cometidos antes de esa fecha.
El Congreso Nacional conmemora a las víctimas de esa misma dictadura, renegando así de tan pomposo nombre: Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.
Porque tener memoria por la verdad y la justicia, significa también, reconocer que enemigos viscerales de la democracia, como las organizaciones armadas ERP, MONTONEROS, FAR y otras, tomaron las armas contra las instituciones democráticas, cometieron atentados terroristas, robos, secuestros y asesinatos.
Tener memoria, significa no olvidar
Que el 04/06/73 las FAR asesinaron al dirigente gremial peronista Pascual Almada.
Que el 16/6/73 asesinaron al Director del Diario Noticias de Tucumán, Ángel Raffo.
Que el 25/6/73, el ERP asesinó al dirigente peronista Alberto Arnesto y el 25 de setiembre del mismo año, Montoneros asesinaba al dirigente gremial peronista, José Rucci.
Que el 19 de enero 1974, 240 guerrilleros erp atacaron el regimiento de azul con el objeto de robar armas para la Compañía de Monte Ramón Rosa Jiménez, que luego se instaló en Tucumán.
Que el 14/2/74 los Montoneros asesinaron al radical Hipólito Acuña y el 22/3/74 al gremialista Rogelio Coria. Los asesinos de este último, fueron condecorados por la organización gerrillera, por la “valiente actitud” de asesinar a un hombre desarmado y sin custodia.
Que el 4/4/74 los Montoneros asesinaron al Secretario General de esa Regional de la CGT, Antonio Pedro Magaldi y el 15/7/74 asesinaron al dirigente radical Arturo Mor Roig.
Que esta lista de atentados, secuestros, robos y asesinatos, es interminable. Pero a a estos hechos se los pretende borrar de la memoria, ocultándose parte de la verdad y negando justicia.
Orlando Agustín Gauna
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