Nuestra clase política se ha enfrascado en un urgente debate sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo. Para ellos, parecía cuestión de vida o muerte sancionar esa Ley.
De un día para otro, también como cuestión de vida o muerte, era imprescindible sancionar la nueva Ley de medios modificando la que existía desde la época de la dictadura. Ahora, se viene la urgencia en tratar la legalización del aborto. Así, de golpe, sin anestesia, se debaten y sancionan leyes que no figuraban en las plataformas políticas de los legisladores al momento de postularse como candidatos a representar a los argentinos.
Pero lo que todos prometían solucionar, la seguridad vial y la inseguridad social, no tienen urgencia en tratar de manera eficaz.
La seguridad vial se deterioró seriamente al eliminarse casi totalmente el sistema ferroviario. Toda la carga que se desplazaba por ferrocarril, ahora se moviliza por rutas colapsadas y destruidas, que además carecen de los correspondientes controles. Pero hoy es imposible esperar que el clan Moyano permita la pérdida de afiliados por cambio de actividad de esos trabajadores (de camioneros a ferroviarios).
También la industria automotriz tiene razones de pe$o para impedir que se desaliente el uso de camiones, colectivos y autos.
La inseguridad social se ha incrementado día a día exponencialmente a como se incrementa la exclusión social, la pobreza y la indigencia.
A la vez, se persigue a los funcionarios policiales ante cualquier inconsistente denuncia de delincuentes capturados. Entonces surge espontáneamente la expresión del gobernador de Buenos Aires, “tengo las manos atadas”.
Nuestros representantes, solo tienen capacidad para hacer declaraciones mediáticas ante temas tan candentes como la seguridad vial, la inseguridad social, la desocupación o la exclusión. Pero no para solucionarlos.
Por el contrario no tienen inconvenientes en poner en la palestra, debatir y sancionar leyes controvertidas o innecesarias, de manera urgente.
Mientras tanto, en
Dios y
Orlando Agustín Gauna
No hay comentarios:
Publicar un comentario