DEBEN SER LOS GORILAS, DEBEN SER...

ALERTA MILITAR POR UNA OPERACIÓN OFICIAL PARA DENUNCIAR UN SUPUESTO COMPLOT

El miércoles de la semana pasada, en horas de la noche, dos individuos vestidos con uniforme militar ingresaron al Batallón de Ingenieros de Campo de Mayo por los fondos del cuartel. Fueron advertidos por un soldado centinela, quien le gritó el "Alto quién vive". Al no obtener respuesta, les "vació un cargador de FAL", por lo que los intrusos huyeron por la parte trasera lateral de la unidad, hacia Plaza de Aguas, siendo avistados por otro centinela, quien también les disparó. Al día siguiente, personal de Gendarmería realizó pericias, encontrando solamente rastros (huellas). La hipótesis que se maneja como más probable, descartando un intento de copamiento, es que se haya tratado de una operación para constatar el grado de alistamiento de la guardia y su capacidad operativa, es decir, si el sistema de seguridad era vulnerable. En medios de inteligencia de Ejército trascendió que los primeros análisis vincularían esta actividad a sectores vinculados a organizaciones insurreccionales de izquierda, cuando faltan pocos días para que se cumplan 21 días del copamiento al cuartel del Regimiento de la Tablada. No se descarta tampoco que se haya tratado de una provocación. En pasillos del Edificio Libertador existe el total convencimiento de que los tiempos difíciles institucionales que se están viviendo y se avecinan podrían llevar a alguna mente "cazadora de conspiraciones" a intentar otra "Tablada" para echar una cortina de humo sobre el derrumbe del político e involucrar al Ejército o un sector del mismo en actitudes golpistas. En el Ejército hay sectores convencidos de que en Olivos se estaría pergeñando una operación para inventar una supuesta asonada militar. El proyecto coincidiría con el primer paso ya dado con las supuestas amenazas contra la vida de CFK durante uno de sus viajes en helicóptero, cuya investigación hasta ahora sólo produjo un inverosímil sospechoso. Otro avance en el mismo sentido fue la denuncia que la Presidenta y su marido hicieron esta semana sobre un complot para dar un golpe de Estado institucional bajo la conducción de Julio Cobos.

Medidas de prevención

Las situaciones mencionadas, que no son aisladas, llevaron a modificar y reforzar los sistemas de seguridad en las principales unidades militares, entre ellas el Colegio Militar de la Nación. Lo que sí tienen claro los militares es la necesidad de no entrar en los juegos que plantean sectores del gobierno. La consigna que circula es “aguantar lo que sea” sin prestarse a ninguna manipulación por parte de los grupos de inteligencia K. También se señala que el clima de inestabilidad económica y la pérdida creciente de confianza de la clase media en la política económica, están precipitando los tiempos hacia un panorama de ingobernabilidad. No se descarta entonces que, como lo hiciera el alfonsinismo 20 años atrás, Kirchner pretenda usar a las Fuerzas Armadas para distraer a la opinión pública mediante el show mediático de una conspiración cívico-militar inventada por la SIDE.

Por Alexis Di Capo