Partidario del intervencionismo económico, jugó con su imagen de político con experiencia y limpio de corrupción, fama que se forjó ocupando los puestos de presidente del Tribunal de Cuentas, de ministro de Justicia y de alcalde de Varsovia. Como ministro de Justicia trabajó contra el crimen organizado y promovió un sistema jurídico riguroso y represivo. "Soy y seré partidario de la pena de muerte", afirmaba abiertamente. Fiel a sus convicciones conservadoras, prohibió varias manifestaciones de homosexuales en Varsovia.
El juez inicuo
-
Ecos de los setenta
Por Agustín De Beitia
La Prensa
25.10.2025
La parábola del juez inicuo y la viuda que presenta el Evangelio del
domingo último (...
Hace 1 día
No hay comentarios:
Publicar un comentario