martes, 27 de agosto de 2013

Acto de homenaje a las victimas del terrorismo



Como lo ha hecho en los últimos años, desde el 2006, la Asociación de Familiares y Amigos de las Víctimas del terrorismo en Argentina (AfaVitA),invita a todos los ciudadanos de bien, al acto anual de RECORDACIÓN y HOMENAJE a quienes perdieron la vida “a manos” del accionar de las organizaciones armadas, que asolaron nuestro país en las décadas de los años 60/70 y 80, 
HOY OLVIDADOS Y hasta NEGADOS, por un gobierno que emplea la MENTIRA y la FALSEDAD como sus "armas" más letales. 
Dicho acto se realizará el jueves 3 de Octubre próximo, a las 19 hs. en la Plaza San Martín (Av. Santa Fé al 700) de la Cap. Fed. 
 ¡¡¡Por favor, NO DEJE DE ACOMPAÑARNOS!!!. 
¡¡¡Es por el futuro de la Nación, que es el de nuestros hijos y nietos!!! 
(NO se suspende por lluvia) 
Recepción de adhesiones: afavita@yahoo.com.ar

 Silvia IBARZÁBAL                                     Gabriel MIRAZ 
    Presidente                                                       Secretario

viernes, 16 de agosto de 2013

Alicia Kirchner y el Ministerio de la droga

El utilitario que fue encontrado abandonado en la localidad de Santo Domingo, Provincia de Santa Fe, con 450 Kg. de marihuana en enero del año pasado, deja muchas incógnitas luego de la sentencia judicial. 
La instrucción judicial la llevó a cabo el Juez Reinaldo Rodriguez, el mismo que permitió hace unos años, que dos víctimas de la trata de personas se auto incriminaran como autoras de falsa denuncia, luego de haber declarado como eran sometidas a explotación sexual. 
Me refiero a Romina Gamarra y María Cristina Ojeda. 
El mismo Juez que dejó prescribir la causa contra la mafia del transporte de colectivos urbanos de la Ciudad de Santa Fe. 
El mismo que quedó al borde del juicio político por presuntas irregularidades en el pago de bonos en default a su valor nomimal, pese a que habían sido comprados después de la devaluación y completamente desvalorizados. 
Estos antecedentes ya nos sumen en un mar de dudas. 
Otro elemento a tener en cuenta es lo manifestado en un primer momento por el secretario de Coordinación y Monitoreo Institucional del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, Carlos Castagnetto, quien aseguró que la camioneta hallada en la ruta 4 de esta provincia con droga en su interior “no pertenece” a esa cartera, y dijo que el Ministerio se “presentará como querellante” ante el Juzgado correspondiente. 
Pero no trascendió que el ministerio de Desarrollo social se hubiera presentado como querellante.
Pura espuma como el liso con “corbata”. 
Otro detalle significativo es que en la página web del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, si uno consultaba las posibles infracciones de tránsito del vehículo secuestrado, se constataba que tenía varias infracciones por mal estacionamiento en zonas cercanas al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. 
Ahora, ese dominio no registra infracciones. 
¿Quién pagó las multas? 
También es muy raro que ladrones de vehículos, les compren cubiertas nuevas a los automotores robados. Se comprobó que los delincuentes habían comprado cubiertas que se facturaron a nombre del Ministerio.
No es un detalle menor la preocupación del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación por tratar de deslindar su responsabilidad, (hervían los teléfonos) hasta que la causa quedó radicada en el Juzgado del sospechoso Juez. 
Después, todo fue silencio. ¿Acaso tranquilidad? 
Ya lo habían encontrado, meses antes, al hijo de Emilio Pérsico transportando droga en una camioneta de la flota del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. El mismo Ministerio
La Empresa DDC S.R.L., a cuyo nombre estaba la documentación del rodado, se abstuvo de hacer manifestaciones mediáticas. 
DDC S.R.L. es una empresa que presta servicios de combis y minibuses y nunca se aclaró si tenía contrataciones con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. 
Ahora la justicia acaba de condenar a dos imputados por responsabilidad en ese hecho. 
Uno, ya está en condiciones de salir en libertad. 
El otro, pasará a ser parte del Vatayón Militante y podrá gozar de salidas culturales. 
Los restantes delincuentes, autores, cómplices, instigadores y auxiliadores de este tráfico de drogas, seguirá traficando como mercaderes de la muerte.
Pero el Comisario Hugo Toniolli seguirá preso. Acaso esté pagando la osadía de haber querido seguir investigando si efectivamente la camioneta con droga estaba al servicio del ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

Orlando Agustín Gauna Bracamonte

lunes, 12 de agosto de 2013

Los católicos, las elecciones y el anticristo

Son innumerables las denuncias por corrupción contra muchos funcionarios del gobierno del Frente Para la Victoria. 
Sería pecar de exceso de ingenuidad creer que este gobierno no es responsable de actos de corrupción. 
El Papa Francisco, afirmó que los corruptos son "el anticristo", hacen mucho daño a la Iglesia y son "un peligro, ya que son adoradores de sí mismos, sólo piensan en ellos y consideran que no necesitan de Dios". 
Y reflexionando sobre estas palabras, basta recordar las expresiones de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner cuando dijo “Sólo hay que tenerle temor a Dios y a mí, un poquito”. Faltaba que dijera que también había que rendirle culto de Adoración a ella. 
Sus expresiones, y su responsabilidad en los actos de corrupción de su gobierno permiten que “le quepa el sayo”. Los corruptos son el anticristo. 
Durante las últimas elecciones vi con tristeza, como muchos católicos, algunos, católicos practicantes, “trabajaban” fiscalizando los comicios para el Frente Para la Victoria. 
Ellos mismos y otros muchos también habrán votado por “el anticristo”, pero afirman ser católicos, dicen amar a Dios, unos van a Misa todos los domingos y fiestas de guardar, otros, de vez en cuando, sin embargo, no dudaron en votar por “el anticristo”. 
Tampoco dudan en votar a candidatos que proponen el aborto, y apoyan el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero manifiestan alegría por la designación del Papa Francisco. 
El mismo Papa que dijo que los corruptos "son un peligro también para los cristianos”. "Cuanto mal hacen los corruptos en la comunidad cristiana, que el Señor nos libere de caer en ese camino de la corrupción". "Pecadores sí, corruptos no". 
Ante mi incomprensión por esta dualidad de criterio, una católica practicante me manifestó que eran “dos cosas distintas”. 
 Sigo sin comprender como se puede estar bien con Dios y con el diablo.
Orlando Agustín Gauna

miércoles, 7 de agosto de 2013

Rosario. Muerte por dolo o negligencia.

El martes 6 de agosto, a media mañana, la Ciudad de Rosario se vio sacudida por una fuerte explosión. 
Tras el estruendo, sangre y muerte. 
El suceso se produjo en calle Salta 2141 de la Chicago argentina. 
Fue por negligencia o impericia que se provocó un gran escape de gas, origen de la explosión y el fuego. 
Los números fríos, esos que sirven para las estadísticas, hablan a 24 horas del hecho, de 10 muertos, 11 desaparecidos y numerosos heridos. 
La Presidente de la Nación, que no abandonó su descanso en el Calafate cuando ocurrió la tragedia de Once, ahora, a pocas horas de los comicios, no podía estar ausente. 
Y como no podía ser de otra manera, recibió algunos aplausos y muchos silbidos e insultos. Hasta se vio volar una botella. 

Muchos definen el hecho como la mayor tragedia de la historia de Rosario. 
Gente de poca memoria. 
Parece que nadie recuerda otra tragedia de similar magnitud, que no ocurrió ni por negligencia ni por impericia. 
Fue un hecho que se produjo con premeditación y alevosía. En las tareas previas, participaron de la inteligencia y planeamiento, entre otros, Rafael Bielsa. 

Según Carlos Kunkel, aquellos que ponen bombas son técnicos en explosivos” pero no personas que realicen actos de terrorismo. 
Pues bien, unos “técnicos en explosivos” prepararon e hicieron estallar una bomba instalada en el interior de un automóvil Citroën 2CV estacionado en Junín y Rawson, a la altura de donde hoy está ubicado el Shopping Alto Rosario. 
El atentado fue el 12 de septiembre de 1976. 
Los fríos números, en este caso, hablan de nueve agentes policiales muertos, además de un matrimonio que circunstancialmente pasaba por el lugar en otro automóvil. También resultaron numerosos heridos, algunos con lesiones irreversibles. 
Pero de esta tragedia ocurrida en la ciudad de Rosario, por la acción premeditada y alevosa de criminales de la banda terrorista Montoneros, no se quiere hablar, inclusive, sus cómplices y “simpatizantes” se niegan a que este cruento atentado sea calificado de “lesa humanidad”. 

Estos desean la impunidad y el olvido. 
Por este hecho, los organismos de derechos humanos no claman por MEMORIA Y JUSTICIA.

Orlando Agustín Gauna Bracamonte

viernes, 2 de agosto de 2013

"La fe en Jesucristo nos mueve a la verdad, la justicia y la paz"

Muy apreciados hermanos y hermanas: 
1. Como creyentes y pastores, queremos ser servidores de la reconciliación, en medio del pueblo argentino, y como parte de él. Estamos felices de haber recibido esta vocación. Reconocemos sin embargo nuestra limitación y pobreza, para una tarea tan amplia y exigente. Pero en este Año de la fe, renovamos nuestra confianza, “porque Cristo es nuestra paz” (Ef 2,14). Él ha restablecido la paz por la sangre de su cruz (cf Col 1,20). 
2. La patria argentina ha vivido momentos difíciles y críticos, a lo largo de sus doscientos años de historia. Un tiempo especial de desencuentro y de enfrentamientos dolorosos, fue la década del 70. Han pasado muchos años y siguen surgiendo interrogantes acerca de los hechos ocurridos, y de la responsabilidad que tuvieron personas e instituciones. Al volver sobre aquellos hechos, es preciso tener en cuenta el contexto socio-político de la época, y los diversos actores que entonces intervinieron. Algunas afirmaciones recientes, a partir de las declaraciones del ex-presidente “de facto” J. R. Videla, atribuyen a quienes entonces conducían el Episcopado, alguna complicidad con hechos delictivos. Como ha respondido el actual presidente de la Conferencia: que haya habido “una suerte de connivencia es totalmente alejado de la verdad de lo que hicieron los obispos involucrados en ese momento” [la presidencia del Episcopado] (La Nación 5/8/12). 
3. Conocemos los sufrimientos y reclamos de la Iglesia, por tantos desaparecidos, torturados, ejecutados sin juicio, niños quitados a sus madres, a causa del terrorismo de Estado. Como también sabemos de la muerte y desolación, causada por la violencia guerrillera. No podemos ni queremos eludir la responsabilidad de avanzar en el conocimiento de esa verdad dolorosa y comprometedora para todos. A pesar de que la historia vivida no se deja desentrañar fácilmente, y tampoco la responsabilidad que cabe a cada persona, nos queda la preocupación por completar un estudio demorado pero necesario. 
4. De nuestros hermanos mayores, los obispos que nos precedieron, hemos recibido su palabra y testimonio. Sobre su modo de actuar, volvemos con respeto, sin poder conocer a fondo cuánto supieron personalmente de lo que estaba sucediendo. Ellos intentaron hacer cuanto estaba a su alcance por el bien de todos, de acuerdo con su conciencia y juicio prudencial. Por eso mismo, aun deseando penetrar más en la verdad de los hechos y de las personas, consideramos conveniente recordar algunos párrafos de su enseñanza, que al repasarla aparece lúcida y oportuna. Reconocemos, además, que no todos los miembros de la Iglesia pensaron y actuaron con idénticos criterios. 
5. De entre tantas declaraciones y publicaciones, ofrecemos algunos ejemplos: “Someter a una persona a la tortura para arrancarle informaciones o confesiones ... siempre es ilícito” (Declaración de la CEA, 16/3/72). “No será vano reiterar que para todo cristiano, no excluidos quienes ejercen autoridad, aún a costa de la eficacia inmediata, hoy como siempre y en toda circunstancia conserva su valor ético: el fin no justifica los medios” (Carta colectiva CEA, Reflexión cristiana para el pueblo de la Patria, 7/5/1977). Unos años más tarde, el documento Iglesia y Comunidad Nacional (1981), condenó de varias maneras todo tipo de violencia. En síntesis: la lucha armada nunca es un camino legítimo para la búsqueda de logros sociales, por más buenos que parezcan. Por eso es reprobable la violencia ejercida por la guerrilla, que aún operando durante el gobierno democrático, atentó contra la vida de personas e instituciones. Pero menos aún puede legitimarse la violencia ejercida por el Estado, fuera de la ley, ni por grupos paramilitares. Es el Estado el responsable de tutelar los derechos de todos (cf ICN 33. 97. 133). Y en esa ocasión dijeron los obispos: “Porque se hace urgente la reconciliación argentina, queremos afirmar que ella se edifica sólo sobre la verdad, la justicia y la libertad, impregnadas en la misericordia y en el amor” (ICN 34). 
6. En el año 2000, la celebración del gran Jubileo, fue una oportunidad importante e inspiradora, que motivó a la Iglesia a revisar su vida y a pedir perdón, como pocas instituciones lo hicieron. En aquella ocasión, imploramos la misericordia de Dios: “porque en diferentes momentos de nuestra historia, hemos sido indulgentes con posturas totalitarias, lesionando libertades democráticas, que brotan de la dignidad humana”; y también “porque con algunas acciones u omisiones hemos discriminado a muchos de nuestros hermanos, sin comprometernos suficientemente en la defensa de sus derechos” (Encuentro Eucarístico Nacional, Córdoba, septiembre del 2000). 
7. Queremos estar cerca de cuantos sufren todavía por hechos no esclarecidos ni reparados. Cuando la justicia es demasiado largamente esperada, deja de ser justicia, y agrega dolor y escepticismo. Sabemos que en miles de familias hay heridas abiertas y angustiosas, por lo acontecido después del secuestro, detención o desaparición de un ser querido. Compartimos el dolor de todos ellos y reiteramos el pedido de perdón a quienes hayamos defraudado o no acompañado como debimos. 
8. Nos sentimos comprometidos a promover un estudio más completo de esos acontecimientos, a fin de seguir buscando la verdad, en la certeza de que ella nos hará libres (cf Jn 8,32). Por ello nos estamos abocando a revisar todos los antecedentes a nuestro alcance. Asimismo alentamos a otros interesados e investigadores, a realizarlo en los ámbitos que corresponda. De nuestra parte, hemos colaborado con la justicia, cuando se nos solicitó información, de la cual podíamos disponer. Además, exhortamos a quienes tengan datos sobre el paradero de niños robados, o conozcan lugares de sepultura clandestina, que se reconozcan moralmente obligados a acudir a las autoridades pertinentes. 
9. Seguimos comprometidos y empeñados en promover la fraternidad y la amistad social en el pueblo argentino, para lograr caminar juntos en la búsqueda del bien común. La reconciliación no es “borrón y cuenta nueva”, y menos impunidad. Es necesario: el empeño en la búsqueda de la verdad, el reconocimiento de cuanto sea deplorable, el arrepentimiento de quienes sean culpables, y la reparación en justicia de los daños causados (cf JUAN PABLO II, Jornada por la Paz 1997). También debemos reconocer que el perdón y la reconciliación son dones de un Dios, que nos hace hermanos. 
10. En este Año de la fe, que estamos comenzando con la Iglesia en todo el mundo, y en el camino del Bicentenario de la Patria (2010-2016), renovamos nuestra vocación de servidores de todos, en especial de los que más sufren. La Virgen María, al pie de la cruz, experimentó el dolor por la muerte de su Hijo. A Ella le pedimos que abrace con ternura a cuantos esperan el consuelo de la verdad, la justicia y la paz. 

Los obispos de la República Argentina 
104º Asamblea Plenaria, 9 de noviembre de 2012

Presos. Los unos y los otros.

Shiva Narada Benítez Díaz de 30 años de edad, de nacionalidad boliviana, desde hace cinco años cumplía prisión en la cárcel de Devoto por secuestros y robos. 
Aún le restaban 10 años para cumplir su condena. Por otros hechos de la misma envergadura, había logrado salir absuelto. 
A pesar de su peligrosidad y probabilidades de reincidencia, gozaba de permiso para concurrir a la Facultad a estudiar. 
El 28 de junio último, entre el bullicio juvenil de los estudiantes, “desapareció” y desde entonces, este joven delincuente anda suelto para aumentar aun mas nuestra inseguridad. 
Pero no es el único. 
El Vatayón Militante fomenta las “salidas culturales” de peligrosos delincuentes. Otros, con salidas transitorias “no vuelven más”. 
Jueces garantistas conceden ligeramente excarcelaciones a temibles delincuentes con “fondosos prontuarios” que en la mayoría de los casos, vuelven a reincidir. 
El delincuente absuelto en el “Caso Piparo”, a las pocas semanas fue capturado en otro hecho delictuoso. 
Marcelo Pablo Diaz, convicto por violación, gozaba de salidas transitorias cuando intentó violar y asesinó a la joven Soledad Bargna.
Todos ellos, además de haberse comprobado sus conductas delictivas, en libertad, constituyen un grave peligro para la sociedad. Cualquiera de nosotros puede volver a ser víctima de su accionar delictivo. 
Pero de ellos no se difunden sus fotografías, para que podamos reconocerlos y denunciarlos. 
Tampoco se ofrecen recompensas para que hasta sus propios cómplices los entreguen. 
Pero a otros presos, imputados de los llamados delitos de “lesa humanidad”, no se les permite ni la debida atención médica en centros de salud adecuados por temor a un peligro de fuga. Y producida la fuga de dos de ellos, se ofrece una recompensa de $ 2.000.000 por datos que sirvan para su captura y sus fotos se difunden como en el lejano Oeste. 
Cualquier ser racional, sabe que estos prófugos no significan ningún peligro para la sociedad, que además de lo avanzado de su edad, hoy carecen del uso de la estructura del poder del Estado, del que pudieron haberse valido para cometer los delitos que se le imputan. 
Pero el gobierno, en su afán de venganza y no de justicia, agota todos los recursos para que quienes combatieran al terrorismo, con medios lícitos o no, mueran en la cárcel. 
El resto de los delincuentes, no es preocupación del gobierno.
Y a la justicia tampoco le interesa el rápido esclarecimiento de los casos de corrupción, ni el estado de indefensión de los ciudadanos. 

Orlando Agustín Gauna Bracamonte

Coca Cola


En la Ciudad de Santa Fe estuvimos librados de este veneno hasta que el Gobernador Aldo Tessio, el padre de la ex Fiscal Federal y ex Vice Gobernadora Griselda Tessio, permitiera que ingresara este líquido venenoso. Cabe sospechar que tenia razones de mucho$ pe$o$$$$$$$$$$$$$$$ para permitirlo.